Con la crisis económica que asola el país, cada vez son más los trabajadores que se ven obligados a dejar su trabajo. Y con ello, surgen muchas dudas sobre el futuro, la Seguridad Social y, en concreto, sobre la jubilación.
¿Se cotiza para la jubilación cuando se está en el paro? La respuesta es sí. Aunque no se esté trabajando, se siguen cotizando a la Seguridad Social, por lo que se va acumulando el tiempo necesario para alcanzar la jubilación. No obstante, hay que tener en cuenta que, en algunos casos, el tiempo de cotización puede verse interrumpido, lo que puede retrasar la edad de jubilación.
Desde el primer día en que se cotiza para la jubilación, se está acumulando una pensión. Si se está en el paro, se continúa cotizando y, por lo tanto, se siguen acumulando aportaciones para la jubilación.
¿Cuánto se cotiza para la jubilación estando en el paro? – Infórmate aquí
La jubilación es un derecho adquirido por todos aquellos trabajadores que hayan cotizado la suficiente cantidad de años como para tener derecho a ella. Sin embargo, en algunos casos, los trabajadores pueden quedarse sin trabajo y, por lo tanto, sin cotizar. Esto puede suponer un problema a la hora de jubilarse, ya que se necesitan ciertos requisitos para poder acceder a la jubilación.
En el caso de los trabajadores que se hayan quedado sin trabajo, la situación es un poco más complicada. En primer lugar, deben tener al menos 50 años de edad y haber cotizado un mínimo de 15 años. Si cumplen estos requisitos, podrán acceder a la jubilación parcial, pero no podrán cobrar el 100% de la pensión.
En segundo lugar, los trabajadores que se hayan quedado sin trabajo también tendrán que acreditar un periodo de carencia de, al menos, 12 meses. Este periodo de carencia es el tiempo que debe transcurrir desde que se quedan sin trabajo hasta que pueden acceder a la jubilación.
Por último, los trabajadores que se hayan quedado sin trabajo también tendrán que acreditar un periodo de cotización mínimo de 10 años. Si cumplen todos estos requisitos, podrán acceder a la jubilación parcial.
¿Cuándo estás en el paro sigues cotizando a la Seguridad Social?
La Seguridad Social es una red de protección social creada para asegurar a las personas un mínimo vital en caso de contingencias como el desempleo, la invalidez, la vejez o la maternidad.
En España, el sistema de Seguridad Social está regulado por la Ley General de Seguridad Social, que establece que todos los ciudadanos que residan y trabajen en España tienen derecho a estar cubiertos por la Seguridad Social.
El derecho a la Seguridad Social se adquiere automáticamente al empezar a trabajar y se mantiene mientras se cotiza. La cotización a la Seguridad Social es obligatoria para todos los trabajadores por cuenta propia o ajena, y se realiza a través de la declaración de la renta.
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, la cotización se realiza mediante el pago de la cuota mensual a la Seguridad Social. Los trabajadores por cuenta ajena, por su parte, cotizan a través de la deducción de la cuota correspondiente del salario por parte del empleador.
La cotización a la Seguridad Social tiene un carácter periódico, es decir, se realiza de forma mensual, trimestral o anual. No obstante, en algunos casos es posible realizarla de forma más frecuente si así lo solicita el trabajador.
La cotización a la Seguridad Social sirve para acceder a los beneficios y prestaciones que otorga el sistema, como por ejemplo, el subsidio por desempleo, la pensión de jubilación o la prestación por maternidad.
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, la cotización a la Seguridad Social también sirve para acceder a la cobertura médica del Sistema Nacional de Salud.
Para poder acceder a los beneficios de la Seguridad Social, es necesario que el trabajador haya cotizado durante un mínimo de 180 días en los últimos cinco años. No obstante, en algunos casos es posible acceder a los beneficios con menos cotización, como por ejemplo, en el caso del subsidio por desempleo.
En el caso de los trabajadores por cuenta ajena, si se produce un despido improcedente o un despido disciplinario, el trabajador tiene derecho a cobrar un subsidio por desempleo por un máximo de 24 meses. Para poder acceder a este subsidio, el trabajador debe haber cotizado durante al menos 360 días en los últimos cinco años.
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, si se produce un cese de actividad, el trabajador tiene derecho a cobrar un subsidio por desempleo por un máximo de 12 meses. Para poder acceder a este subsidio, el trabajador debe haber cotizado durante al menos 360 días en los últimos cinco años.
En el caso de los trabajadores por cuenta ajena, si se produce un despido improcedente o un despido disciplinario, el trabajador tiene derecho a cobrar un subsidio por desempleo por un máximo de 24 meses. Para poder acceder a este subsidio, el trabajador debe haber cotizado durante al menos 360 días en los últimos cinco años.
En el caso de los trabajadores por cuenta propia, si se produce un cese de actividad, el trabajador tiene derecho a cobrar un subsidio por desempleo por un máximo de 12 meses. Para poder acceder a este subsidio, el trabajador debe haber cotizado durante al menos 360 días en los últimos cinco años.
¿Cuáles son los beneficios de jubilarse estando en el paro?
Hay muchas razones por las que alguien podría beneficiarse de jubilarse mientras está desempleado. En primer lugar, si se jubila mientras está desempleado, podrá cobrar una pensión más alta. Esto se debe a que las personas que no trabajan no tienen ingresos, por lo que el estado les da una pensión más alta. En segundo lugar, si se jubila mientras está desempleado, podrá acceder a una serie de beneficios sociales, como subsidios de desempleo, ayuda al pago de la vivienda y asistencia médica gratuita. En tercer lugar, si se jubila mientras está desempleado, podrá dedicar más tiempo a hacer ejercicio, leer, pasar tiempo con la familia y amigos y hacer otras actividades que disfruta.
Después de estar en el paro, la mayoría de los trabajadores pueden volver a cotizar para la jubilación y recuperar el tiempo perdido. No obstante, hay algunos casos en los que no se puede cotizar, por lo que es importante informarse antes de dejar el empleo.
En España, el período mínimo de cotización para tener derecho a la pensión de jubilación es de 15 años. Si se está en el paro, se cotiza igualmente para la jubilación, ya que el cotizar para la Seguridad Social es obligatorio.