El despido de un trabajador es una decisión que debe tomarse con cuidado por parte de la empresa. No se puede dar de baja a un trabajador de forma arbitraria o sin una causa justificada. Existen una serie de pasos que se deben seguir para garantizar que el despido se lleve a cabo de forma correcta y que el trabajador reciba los beneficios a los que tiene derecho.
La empresa puede dar de baja a un trabajador en cualquier momento y no necesita una razón para hacerlo.
¿Cuánto tiempo tiene una empresa para comunicar una baja a la Seguridad Social?
Una empresa tiene que comunicar una baja a la Seguridad Social en el plazo de cinco días hábiles a partir de la fecha en que se produce la baja.
¿Qué pasa si no se da de baja a un trabajador? – La sanción por no dar de baja a un trabajador
En primer lugar, cabe señalar que la sanción por no dar de baja a un trabajador es una infracción muy grave. Si un empleador no da de baja a un trabajador, está cometiendo un fraude y será sancionado por ello. La sanción puede ir desde una multa hasta la clausura de la empresa.
¿Cómo saber si te han dado de baja en la empresa?
Según el artículo 100 del Estatuto de los Trabajadores, el despido es la extinción del vínculo laboral a instancia de la empresa y con carácter definitivo. Sin embargo, el despido no siempre es automático ni tampoco supone necesariamente el final de la relación laboral.
Existen diferentes tipos de despido:
– Despido improcedente: es aquel que se realiza sin ajustarse a una causa justificada prevista en la ley. En este caso, el trabajador puede reclamar ante los tribunales para que se declare la nulidad del despido y se le readmita en su puesto de trabajo.
– Despido procedente: es el que se ajusta a una causa justificada y, por tanto, no es susceptible de reclamación. Las causas justificadas pueden ser:
• La extinción del contrato a término fijo o de obra o servicio determinado por su finalización.
• El incumplimiento grave o reiterado por parte del trabajador de sus obligaciones contractuales.
• La falta de aptitud del trabajador para el puesto de trabajo debidamente acreditada mediante informe pericial.
• La supresión o transformación sustancial de las condiciones de trabajo acordadas.
• La realización de actos de violencia o amenazas en el centro de trabajo.
• La comisión de un delito en el ámbito laboral.
• La aplicación de medidas disciplinarias previstas en el Estatuto de los Trabajadores, tales como la suspensión o el despido disciplinario.
Para que el despido proceda, la empresa debe notificar por escrito al trabajador las causas que lo justifican y debe haber agotado todos los medios de conciliación previstos en la ley.
En el caso de que el despido sea improcedente, el trabajador podrá optar por:
– La readmisión en su puesto de trabajo, si así lo solicita.
– La indemnización por despido improcedente, que será de 33 días de salario por año de servicio, con un máximo de 24 mensualidades.
En el caso de que el despido sea procedente, el trabajador tendrá derecho a la indemnización por despido procedente, que será de 20 días de salario por año de servicio, con un máximo de 12 mensualidades.
La empresa tiene un plazo de 5 días hábiles para dar de baja a un trabajador, a partir de la fecha en que se le notifica la decisión de la empresa.
La empresa tiene un plazo de 15 días para dar de baja a un trabajador desde la fecha en que se produce el despido.
