¿Alguna vez has sentido que tu jefe te está presionando para que hagas algo? Si es así, no estás solo. De hecho, según una encuesta realizada por CareerBuilder, el 61% de los empleados sienten que sus jefes los presionan de manera injustificada. Si bien alguna presión por parte de tu jefe es normal, demasiada puede ser agotadora y, en algunos casos, incluso puede llevar a la burnout laboral.
En primer lugar, es importante identificar el tipo de presión a la que se está siendo sometido. Si se trata de una presión positiva, es decir, de algo que motiva y estimula a rendir más, entonces es algo que hay que aceptar y tratar de canalizar de la mejor manera. Si se trata de una presión negativa, es decir, de algo que genera estrés y ansiedad, entonces es importante plantearse si se está dispuesto a aceptar esa situación o si, por el contrario, se prefiere buscar otro empleo.
¿Qué hacer cuando mi jefe me presiona demasiado?
Hay muchas formas de abordar este problema, pero dependiendo de la relación que tengas con tu jefe y la empresa, algunas serán más efectivas que otras. Si tu jefe es el problema, podrías tratar de hablar con él o ella para ver si hay algo que puedas hacer para ayudar a aliviar la situación. Si la empresa es el problema, podrías tratar de buscar una solución a nivel de la organización. Aquí hay algunas ideas para abordar este problema:
-Habla con tu jefe. Si tu jefe es el que está presionando demasiado, habla con él o ella y trata de llegar a un acuerdo. Puedes explicarle cómo te sientes y pedirle que te dé más tiempo o te ayude a dividir mejor el trabajo. Si tu jefe no está dispuesto a cambiar, podrías considerar hablar con tu gerente o incluso con el director de la empresa.
-Haz un plan. Si la empresa es el problema, trata de hacer un plan para abordar el problema. Puedes tratar de hablar con tu jefe o con otras personas de la organización para ver si pueden cambiar algunas de las cosas que están causando el problema. También puedes tratar de hacer algunos cambios por tu cuenta, como trabajar en horarios más flexibles o teletrabajar.
-Considera cambiar de empresa. Si nada más parece funcionar, quizás sea el momento de buscar otro trabajo. Si estás siendo presionado demasiado en tu trabajo actual, quizás no sea el lugar adecuado para ti. Busca oportunidades en otras empresas que sean mejor para ti y que se adapten mejor a tus necesidades.
¿Cómo manejar un jefe que humilla a un empleado?
Si estás siendo humillado por tu jefe, lo primero que debes hacer es identificar si estás siendo tratado de manera injusta. Si tu jefe está tratando de hacerte sentir incómodo o si está utilizando el poder que tiene sobre ti de manera abusiva, entonces es importante que hables con él o ella acerca de la situación. Si tu jefe no está dispuesto a escuchar tus quejas o si no hace nada para cambiar su comportamiento, entonces es posible que debas considerar hablar con tu gerente o incluso presentar una queja formal.
Cómo defenderse de un jefe abusivo: 10 estrategias para protegerse
1. Identifique el abuso. Si su jefe le grita, le humilla o le hace sentir incómodo de manera regular, es posible que esté siendo abusado. Si no está seguro, hable con un amigo o un asesor de confianza para obtener una segunda opinión.
2. No se quede callado. Si habla con su jefe y este no toma medidas para cambiar su comportamiento, considere hablar con un gerente o el director de recursos humanos.
3. Guarde pruebas. Si tiene un registro de los incidentes de abuso, esto puede ser útil si decide presentar una queja formal.
4. Exija un cambio de comportamiento. Si habla con su jefe y este se niega a cambiar su comportamiento, puede considerar hablar con un gerente o el director de recursos humanos.
5. No tolere el abuso. Si se siente abusado, no dude en tomar medidas para protegerse. Esto incluye levantar la voz, alejarse del abusador o, si es necesario, llamar a la policía.
6. No se culpe a usted mismo. El abuso es una elección del abusador, no una reacción a su comportamiento.
7. No acepte el abuso como parte de su trabajo. El abuso no es parte de ningún trabajo y no debe aceptarlo como tal.
8. Conozca sus derechos. Informese sobre sus derechos laborales y las leyes que protegen contra el acoso y el abuso en el lugar de trabajo.
9. Hable con un abogado. Si el abuso ha llegado a un nivel tal que usted se sienta amenazado o teme por su seguridad, consulte a un abogado para explorar sus opciones legales.
10. Infórmese sobre los recursos disponibles. Si ha sido víctima de abuso en el lugar de trabajo, hay recursos disponibles para ayudarlo a recuperarse y protegerse.
¿Cómo decirle a mi jefe que no estoy de acuerdo con su forma de ser?
Hay muchas formas de decirle a tu jefe que no estás de acuerdo con su forma de ser. Puedes ser directo/a y decirle que no te gusta la forma en que se dirige a ti o a otros, o puedes ser más sutil y decirle que te gustaría que hiciera ciertas cosas de manera diferente. Sea cual sea tu enfoque, es importante que sea respetuoso y que no te pongas a la defensiva. De esta forma, tu jefe podrá tomar tus comentarios en serio y quizás incluso llegar a un acuerdo contigo sobre cómo mejorar la situación.
Llegar a un acuerdo con tu jefe puede ser difícil, pero no imposible. Si te sientes presionado por tu jefe, lo primero que debes hacer es tratar de hablar con él o ella para llegar a un acuerdo. Si eso no funciona, puedes buscar ayuda de un gerente o de un abogado laboral.
En primer lugar, es importante identificar si tu jefe realmente está presionándote o si simplemente está siendo exigente. Si tu jefe está siendo exigente, es importante mantener la calma y tratar de cumplir con sus expectativas. Sin embargo, si tu jefe está realmente presionándote, es importante hablar con él o ella para tratar de solucionar el problema. Si hablar con tu jefe no funciona, es posible que tengas que considerar buscar otro trabajo.